11 puntos clave para promover la innovación

Brasil cuenta con uno de los ecosistemas de emprendimiento más desarrollados en América Latina, al aplicar programas para expandir las actividades económicas del sector público y privado. Esto ha permitido el crecimiento de pequeñas y medianas empresas.

Entre las iniciativas que impulsaron tales objetivos está la aprobación de la Ley de Innovación, creada en el año 2005 para estimular nuevos procesos y productos, mediante la integración de universidades y empresas tecnológicas, tanto públicas como privadas.

El informe de la REPICT (Red de Tecnología e Innovación de Rio de Janeiro), reseñado en el documento Desarrollo empresarial en Brasil (CAF, 2012), resume los principales mecanismos de esta ley:

• Formación de alianzas estratégicas y proyectos cooperativos entre las ICT y las empresas.
• Uso compartido de los laboratorios científicos y tecnológicos del país para facilitar el intercambio de conocimiento.
• Apoyo a servicios tecnológicos: certificación de conformidad, información tecnológica, cursos de educación continua.
• Autorización a las instituciones públicas para participar, minoritariamente, en el capital de empresas para desarrollar proyectos científicos y/o tecnológicos innovadores.
• Remuneración del investigador.
• Licencia para el investigador para crear su propia empresa durante un plazo de tres años.
• Reglamentar el papel de la Fundación de Amparo, al destinar hasta el 5% del monto total de los recursos financieros a la ejecución de proyectos.
• El Núcleo de Innovación Tecnológica (NIT) se hace obligatorio.
• Estímulo al inventor independiente.
• Tratamiento diferenciado garantizado para pequeñas y medianas empresas. Apoyo a incubadoras y parques tecnológicos.
• Concesión de incentivos fiscales para la innovación. Subvención económica directa a las empresas innovadoras.