CAF y Brasil: una alianza para impulsar el crecimiento
En el último lustro (2016-2020) CAF aprobó operaciones para Brasil por USD 7.367 millones, lo cual representa un promedio de USD 1.473 millones por año, y los desembolsos totales se ubicaron en USD 7.759 millones, que representan un promedio anual de USD 1.552 millones. Al cierre de mayo de 2021, la cartera de Brasil se ubicó en USD 2.168 millones, equivalente al 8% de la cartera de CAF.
Por un lado, Brasil comenzaba a necesitar ayuda contracíclica para enfrentar las emergencias económicas derivadas de la pandemia, y por otro lado, era fundamental que hubiera una continuidad en el financiamiento de los estados y municipios para las obras de desarrollo urbano y regional, así como para el sector privado brasileño, en operaciones destinadas a mejorar la competitividad nacional.
En 2020, Brasil alcanzó el mayor volumen de desembolsos por parte del banco y también registró el mayor número de proyectos considerados "verdes" (aquellos que presentan acciones para mitigar y/o adaptarse al cambio climático así como aquellos que dan valor al capital natural).
El año estuvo inicialmente marcado por la concentración de esfuerzos para apoyar al país en la realización de medidas para combatir la pandemia Covid-19, principalmente en la búsqueda de la reactivación económica, ya sea a través de operaciones con, sin garantía soberana o técnicas de cooperación. En 2020, se aprobó un financiamiento de USD 350 millones por parte del Ministerio de Economía, para cubrir costos con ayuda de emergencia, y una línea de crédito de USD 100 millones al BDMG (Banco de Desarrollo de Minas Gerais), destinado a emprendedores del estado en una situación de vulnerabilidad por la crisis sanitaria.
También en el marco del apoyo para combatir el Covid-19, Brasil recibió un paquete de recursos relacionados con la cooperación técnica en ayuda humanitaria de USD 400 mil, destinados a las ciudades de Fortaleza, Porto Alegre, Salvador y São Bernardo do Campo para comprar equipo para combatir el coronavirus y USD 50.000 a la organización no gubernamental Expedicionarios da Saúde, para la compra de concentradores de oxígeno, para poblaciones indígenas vulnerables de la Amazonía.
Además de brindar apoyo directo al gobierno federal, CAF continuó sus operaciones tradicionales con estados y municipios, habiendo desembolsado USD 299 millones en el período. También se firmaron cinco contratos de crédito, por un total de USD 382 millones, con el estado de Alagoas y las ciudades de São Bernardo do Campo, Mogi das Cruzes y Guarulhos.
Actualmente hay 31 operaciones de financiamiento en curso con municipios brasileños, en programas integrales de recuperación urbana, mejora de la movilidad, saneamiento y drenaje, salud, educación e inclusión financiera y social. El enfoque del banco hacia los municipios de Brasil significa que la institución ahora se conoce en el país como el "banco de la ciudad".
Con los estados, la estrategia de CAF es financiar, principalmente, operaciones de mejora y construcción de rutas de transporte interurbano y estatal, incluyendo acciones de seguridad vial, corredores de integración logística, movilidad urbana en áreas metropolitanas y sistemas de gestión de residuos sólidos.
En operaciones sin la garantía soberana de la Unión destaca la consolidación del apoyo a bancos y agencias públicas de desarrollo. Hasta principios de 2020, solo BDMG (Banco de Desarrollo de Minas Gerais) era cliente de CAF. Desde entonces, el banco ha comenzado a atender a otras tres instituciones de desarrollo local, por un total de USD 340 millones en líneas de crédito destinadas, principalmente, a financiar pequeñas y medianas empresas. Son BNB (Banco do Nordeste), Desenvolvimento SP, BRDE (Banco de Desenvolvimento do Extremo Sul).
Asimismo, en 2020, en el ámbito del apoyo a las instituciones de desarrollo, se desarrolló el servicio de gestión de deuda, donde CAF, a través de su plataforma financiera, contrata instrumentos de cambio y cobertura de tipos de interés para sus clientes.
Este servicio ayudó a catalizar la transferencia de recursos en 2020, con la primera operación con desembolso en reales, para Desenvolvimento SP, seguida de otra para BRDE. Completando sus operaciones en este segmento, continúa su relación con bancos privados como Santander, Banco do Brasil, Itaú y Bradesco a través de líneas de crédito. Los desembolsos totales para el segmento no soberano alcanzaron la marca de USD 1,44 mil millones.
Finalmente, en 2020, Brasil recibió el mayor volumen de recursos en cooperación técnica desde que ingresó como socio de CAF en 2007, totalizando USD 5 millones, de los cuales USD 3 millones fueron para un estudio detallado sobre un nuevo modelo de concesión ferroviaria de la Malha Oeste.