Red 5G: Inversión por un mejor futuro

La digitalización dejó de ser un privilegio al que pocos tienen acceso. La pandemia del Covid-19 aceleró el desarrollo de la tecnología 5G y tanto gobiernos como el sector privado han identificado las oportunidades en tecnologías disruptivas apoyadas en ella como el internet de las cosas (IoT), big data e inteligencia artificial (IA), entre otros; con un impacto transversal a todos los sectores económicos con una mayor eficiencia, nuevos servicios y modelos de negocio.

La red 5G no solo permite una mayor velocidad y confiabilidad para hacer videollamadas o ver contenidos multimedia en los celulares, también habilitará la asistencia médica en remoto con aplicaciones como la cirugía a distancia mediante robots o monitorización de indicadores vitales de enfermos crónicos gracias a una rápida atención médica; en las ciudades se podrá procesar en tiempo real la información y la gestión de temas estratégicos como el tráfico, la iluminación o el recojo de basuras; entre otros beneficios.

Para los usuarios también surgen oportunidades como contar con diversas herramientas y sensores para controlar el consumo de agua, energía eléctrica residencial en general y de algunos electrodomésticos; mientras que en el plano industrial se caracterizará por la implantación masiva de dispositivos de internet de las cosas, así como de inteligencia artificial en las máquinas, con robots por control remoto en tiempo real, gracias a su baja latencia.

En el informe “El impacto de la digitalización para reducir las brechas y mejorar los servicios de infraestructura” de CAF -banco de desarrollo de América Latina-, se identificó que la adaptación de las regulaciones a los nuevos formatos y usos tecnológicos, así como la gestión de los datos o la convergencia entre sectores, son algunos de los principales desafíos que tienen los gobiernos de América Latina y el Caribe para cerrar la brecha con las economías avanzadas.

 “La inversión y el despliegue de las redes 5G serán clave para la recuperación económica y social de América Latina. Podrá contribuir a reducir la brecha digital y potenciar la transformación digital al soportar nuevos dispositivos y servicios en tiempo real en manufactura, energía, ciencias de la vida y agricultura. Potenciar la inversión será crítico para que nuestra región no quede rezagada en esta nueva revolución industrial; por ello desde CAF estaremos lanzando el primer Laboratorio de Transformación Digital para acompañar a los países y al sector privado en la transición hacia estas redes de nueva generación y cerrar la brecha digital”, aseguró Mauricio Agudelo, coordinador de la Agenda Digital de CAF.

El sector público es un actor clave en el desarrollo de la tecnología 5G como habilitador de las palancas necesarias para fomentar su despliegue y acelerar su adopción. La hoja de ruta busca proporcionar recomendaciones en las distintas líneas claves para acelerar el 5G desde el sector público: ciberseguridad, espectro, regulación 5G y otras tecnologías asociadas que promuevan la inversión del Estado y del sector privado.

La inversión en este sector es un buen negocio para todos. Las simulaciones realizadas por el BID en un reciente estudio muestran que luego de un breve período de ajuste durante el cual las economías absorben el costo de la mayor inversión necesaria para digitalizar los servicios, los beneficios netos positivos comienzan a aparecer en el segundo año y continúan acumulándose. Para el décimo año alcanzan el equivalente a casi seis puntos porcentuales del PIB.

Cerrar la brecha digital mediante la inversión en infraestructura también promueve la inclusión social al aumentar la cobertura, eficiencia y calidad de los servicios, mejorando la calidad de vida de las generaciones presentes y futuras con mejores oportunidades de empleo, la diversificación del tejido productivo, la competitividad de las empresas y el desarrollo sostenible de América Latina y el Caribe.