Las desigualdades heredadas, uno de los grandes retos de Colombia

25 de julio de 2023

CAF -banco de desarrollo de América Latina y el Caribe- presentó en Cali el informe RED sobre desigualdades heredadas, que propone una serie de medidas en materia de educación, acceso a oportunidades laborales e inclusión financiera para reducir las desigualdades que se reproducen de generación en generación en Colombia y en América Latina y el Caribe.

América Latina y el Caribe es una de las regiones más desiguales del mundo, y Colombia no escapa a esta realidad. De hecho, el país tiene una alta desigualdad en su distribución del ingreso y de la riqueza, mayor aún a la del promedio regional, y el problema de la desigualdad persiste marcadamente no solo a lo largo de las últimas décadas sino también desde hace siglos.

Esta es una parte del diagnóstico del Reporte de Economía y Desarrollo (RED) 2022 “Desigualdades heredadas: el rol de las habilidades, el empleo y la riqueza en las oportunidades de las nuevas generaciones”, que CAF presentó en la Universidad Javeriana de Cali.

El RED 2022 analiza las principales barreras sociales, educativas, étnicas y geográficas que contribuyen a la reproducción de las desigualdades a lo largo del tiempo, y plantea una serie de políticas públicas para mejorar la movilidad social y nivelar las condiciones en la formación del capital humano, contribuir al funcionamiento de los mercados laborales y brindar condiciones de ahorro para todos los habitantes.

“El informe de CAF confirma que experimentamos un fenómeno que tiene mucho de inercial y encuentra sus raíces en la “lotería de la cuna”, pues factores como el lugar de nacimiento, las características del hogar, el género y la pertenencia a un determinado grupo étnico actúan ya sea como un lastre o como un facilitador para desempeñarse en la vida. En este contexto, desde CAF recientemente lanzamos una nueva estrategia para apoyar a Colombia e impulsar inversiones en las regiones y sectores de la población más vulnerables, con la finalidad de lograr un país más equitativo, próspero y pujante a nivel económico”, dijo Sergio Díaz-Granados, presidente ejecutivo de CAF.

Según el informe de CAF, Colombia tiene importantes oportunidades para superar las desigualdades heredadas. La promoción de más y mejores oportunidades en la educación temprana, básica y superior, en conjunto con el cierre de brechas espaciales y étnico-raciales educativas pero también laborales, y la ampliación de la inclusión financiera para alcanzar a poblaciones que hoy se encuentran fuera de los canales formales de ahorro son espacios de trabajo que pueden seguir reforzándose para asegurar un mejor futuro a los jóvenes colombianos.

Los principales hallazgos del reporte se centralizan en tres ejes de trabajo:

Educación

Solo el 30% de las personas entre 35 y 40 años lograron completar la educación secundaria, con notables disparidades según el origen familiar. En concreto, el 66% de aquellos cuyos padres también finalizaron la educación secundaria, lograron hacerlo, mientras que solo el 23% de aquellos cuyos padres no la completaron alcanzaron ese nivel educativo. Además, se destaca que el 88% de los hijos de padres con niveles educativos medios o altos también alcanzan esos niveles, contrastando con el 96% de los colombianos con niveles educativos bajos cuyos padres también poseen bajos niveles educativos.

Durante el siglo XX se expandió la cobertura en educación primaria y secundaria, permitiendo que tres de cada cuatro colombianos hoy cuente con mayor nivel educativo que sus padres. Pero aún persisten grandes disparidades entre las distintas geografías, puesto que son pocos los municipios en los que se ha observado una movilidad ascendente constante a través de las décadas, mientras que otros están sistemáticamente retrasados, debido a las profundas brechas étnico-raciales, ya que los afrodescendientes y especialmente los indígenas, cuentan con menores chances de movilidad educativa.

Laborales

Las disparidades educativas en Colombia se trasladan e incluso se agrandan en la esfera laboral. Dos personas con similares niveles educativos y de habilidades, tienen diferentes resultados laborales dependiendo, por ejemplo, del nivel socioeconómico de su familia de origen, su zona de residencia o el color de su piel. Es decir, para ciertos grupos desaventajados, la llegada al mercado laboral no garantiza nuevas oportunidades, sino que agrava el peso de las barreras a la movilidad intergeneracional.

Estas brechas de oportunidades se reflejan en el 60% de empleos informales que existen en el país y en los problemas de segregación espacial y de limitaciones para la movilidad de las personas entre regiones, zonas o barrios dentro de las ciudades, situaciones que también son causantes de las desigualdades que enfrentan los colombianos.

Inclusión financiera

El reporte destaca la importancia de la inclusión financiera y de las oportunidades para acumular riqueza. En Colombia, existe un amplio margen de mejora en temas de inclusión financiera, ya que los índices de concentración de activos financieros y reales son de los más altos de la región, mientras que los niveles de conocimiento financiero se encuentran entre los más bajos.