Buenas prácticas de gobierno corporativo: clave en la sostenibilidad de empresas familiares

En el mundo, tres de cada 10 empresas familiares pasa a la segunda generación y solo siete de 100 a la tercera, según cifras de Fundes. En este sentido, y con el objetivo de estimular la continuidad empresarial, CAF -banco de desarrollo de América Latina- y Fundes -fundación internacional que brinda servicios especializados en desarrollar programas de micro, pequeñas y medianas empresas para corporaciones y gobiernos- lanzaron en conjunto la iniciativa "Fortalecimiento del gobierno corporativo en la empresa familiar".

"El programa busca promover las buenas prácticas de gobierno corporativo, las cuales permiten hacer un mejor uso de los recursos de las empresas, una mayor transparencia en los procesos de toma de decisiones y mitigar los riesgos de información asimétrica con los proveedores de recursos financieros", explicó Andrés Oneto, especialista en gobierno corporativo de CAF.

Para Oneto, las ventajas de que las empresas familiares -que hoy representan el 70% en el ámbito mundial- incluyan buenas prácticas de gobierno corporativo dentro de su modelo de gestión, genera beneficios como el aumento de la confianza, a través de la creación de un activo intangible que ofrece una diferenciación y forja valor para la empresa.

Según el gerente de Fundes, José Mauricio Cano, el propósito de la entidad es contribuir al desarrollo económico de América Latina, a través del fortalecimiento de micro, pequeñas y medianas empresas. "Las firmas de origen familiar enfrentan retos particulares para su crecimiento y sostenibilidad. Es por esto que, en alianza con CAF, Fundes diseñó un programa para brindar herramientas a las compañías, que les permitan administrar de una manera adecuada las interacciones entre la familia, la propiedad y la firma, y contribuir de esta manera al desarrollo empresarial y económico de la región", destacó.

El trabajo conjunto entre CAF y Fundes en América Latina ha permitido a la fecha la vinculación de 72 empresas familiares en todo el proceso de mejoramiento de las prácticas de buen gobierno: 64 en Bolivia, 5 en Perú y 3 en Panamá, a través de un acompañamiento constante de consultores especializados, realización de diagnósticos y recomendaciones en estatutos, reglamentos y protocolo familiar.