CAF aprueba operaciones récord por US$ 3.330 millones

·Los recursos serán destinados a mejorar el entorno macroeconómico, la infraestructura, la competitividad y el desarrollo social en la región y promover la integración regional. ·La CAF contribuye a la promoción de una agenda renovada de desarrollo en la región que genere mayor crecimiento y empleo, que sea socialmente equitativo y ambientalmente sostenible.

10 de diciembre de 2003

La CAF cerró el año 2003 con una cifra récord de aprobación de operaciones por US$ 3.330 millones, afirmó hoy en Caracas el presidente ejecutivo de esta institución financiera multilateral, Enrique García, en conferencia de prensa donde indicó que América Latina cerrará el año con un leve crecimiento de sus economías y mejorará su desempeño durante 2004.

García precisó que tras un período recesivo, para el próximo año se prevé un moderado repunte en las economías que puede revertir la tendencia observada en años anteriores y abrir los senderos hacia una recuperación sostenida. Subrayó que la institución que preside estima que América Latina cerrará 2003 con un crecimiento de alrededor del 1,2% del PIB y en 2004 este aumento podría ser cercano al 4% debido a la recuperación de casi todas las economías y un entorno internacional más favorable para la región.

En particular, señaló que para la región andina se estima que el crecimiento pase de una caída de -2,1% en 2003 a 4,4% en 2004, debido al impulso del sector exportador, el repunte de la demanda interna y una recuperación de la economía venezolana. "El ambiente macroeconómico se ha caracterizado por una mayor estabilidad en la mayoría de países de la región, incluyendo la inflación que en promedio bajó nuevamente a un solo dígito", precisó.

Asi mismo señaló entre los aspectos positivos que, particularmente en el segundo semestre, se observó un importante aumento de los flujos de capital privado externo, aunque los niveles alcanzados durante 2003 son sustancialmente inferiores al promedio logrado entre 1998 y 2000. Esta situación ha venido acompañada por una reducción importante en los márgenes de tasas de interés (spread) que pagan los emisores latinoamericanos. En efecto el EMBI para América Latina se encuentra en diciembre por debajo de los 500 puntos básicos, menos de la mitad de lo que presentaba a principios de este año. La CAF estima que esta tendencia positiva continuará durante 2004.

Explicó que estas mejores perspectivas para América Latina se presentan luego de sufrir un período recesivo durante los últimos cinco años que empeoró la situación social en la mayoría de países latinoamericanos, como lo demuestran los últimos indicadores de desempleo y de pobreza.

Con respecto al proceso de integración regional, resaltó como aspectos positivos avances importantes en la relación CAN-Mercosur, y en la integración de la infraestructura regional en el marco de la iniciativa IIRSA (Iniciativa de la Integración de la Infraestructura Regional Suramericana), así como la renovación de las Preferencias Arancelarias Andinas (ATPDEA por sus siglas en inglés y el impulso del enfoque menos ambicioso del ALCA que aísla temas controversiales que entorpecían el proceso. También destacó que más allá del acuerdo de libre comercio entre Estados Unidos y Chile se produjeron avances en las negociaciones entre EEUU y Centroamérica, así como del inicio de las mismas entre Estados Unidos y varios países de la región.

Sin embargo, advirtió que frente a una situación de relativo optimismo, existen varios elementos de riesgo para la región. Entre ellos, recordó que la situación fiscal en varios países sigue siendo frágil, en particular por el peso del endeudamiento público y las crecientes necesidades de financiamiento.

"Otra grave limitación en la región continúa siendo el bajo nivel de competitividad", señaló García, al tiempo de recordar que el desafío en América Latina será mejorar la calidad de su inserción en la economía global basada en mejoras permanentes de su productividad, en un contexto de mayor integración regional.

Adicionalmente, mencionó la persistencia de problemas de gobernabilidad y la pérdida de confianza en las instituciones en los países de la región que han dado origen a tensiones sociales y políticas en varios países. Sin embargo destacó que dichos conflictos han sido manejados por vías democráticas apegadas al marco constitucional, lo que demuestra importantes avances en la madurez política de la región.

García destacó, que no obstante la compleja situación en el entorno regional, la Corporación tuvo importantes logros operativos y financieros en el año que culmina. Además del monto récord de aprobaciones (US$ 3.330 millones), volvió a jugar un rol anticíclico y catalítico traducido en importantes flujos netos positivos de recursos hacia sus países miembros. Todo lo anterior fue posible dentro de un marco de solidez financiera y rentabilidad que ha caracterizado a la CAF y, en ese marco, las principales agencias: Moody´s, Standard&Poor´s y Fitch, ratificaron su calificación de grado de inversión “A”.

El Presidente Ejecutivo mencionó que con estos logros la CAF ha demostrado su compromiso permanente para apoyar a los países miembros en la definición e implementación de una agenda renovada de desarrollo. "Esta agenda debe buscar una inserción eficiente y equitativa en la economía global y reducir los preocupantes niveles de pobreza e inequidades existentes. Para lo anterior destacó que es importante ir más allá de los objetivos de estabilidad macroeconómica, logrando un crecimiento económico sostenido, alto y de buena calidad que adicionalmente sea incluyente, participativo y respete la diversidad cultural y el medio ambiente".

Enfatizó que esta agenda debe ser integral en el sentido de adoptar instrumentos de políticas que compatibilicen en forma simultánea los objetivos de estabilidad macroeconómica, eficiencia, equidad y solidaridad. Ello solo será posible, si se involucran todos los actores de la sociedad: gobiernos, sector privado, sociedad civil y comunidad internacional en el marco de agendas compartidas de largo plazo.

Finalmente, señaló que la acción de la CAF es instrumental en apoyar esta agenda mediante diversos programas dirigidos a mejorar la infraestructura y logística de la región (donde destaca la iniciativa IIRSA), los de gestión ambiental, los programas de competitividad, los destinados a apoyar la gobernabilidad, el comercio exterior y a las pequeñas, medianas y microempresas, así como los programas de desarrollo cultural, comunitario y de desarrollo humano.

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