CAF presenta en Madrid el Informe RED 2013, sobre el emprendimiento en América Latina

El informe de CAF asegura que América Latina presenta una elevada tasa de emprendedores, aunque son pocos los que llegan con ideas de negocio innovadoras y transformadoras. Para variar esta tendencia CAF anima a potenciar nuevas políticas de apoyo al emprendedor

24 de abril de 2014

(Madrid, 24 abril de 2014).- CAF -banco de desarrollo de América Latina- presentó en la oficina del Banco de España en Madrid la novena edición de su Reporte de Economía y Desarrollo (RED 2013), titulado Emprendimientos en América Latina. Desde la subsistencia hacia la transformación productiva. En esta ocasión, el informe puso de relieve las cifras de emprendimiento que se están dando en América Latina, analizando datos oficiales, pero también las respuestas a una encuesta propia realizada en 17 ciudades de la región.

Guillermo Fernández de Soto, director representante de CAF -banco de desarrollo de América Latina- para Europa destacó durante su intervención en la presentación, la importancia de este informe para el entendimiento de la situación de los emprendedores en la región, al tiempo que agradeció al Banco de España, representado en este acto por su directora de Asuntos Internacionales, Pilar L'Hotellerie, su decidido apoyo en la realización conjunta de este seminario de reflexión.

Del documento presentado por Pablo Brassiolo, economista de CAF y uno de los investigadores del estudio, se desprende que América Latina posee una tasa de emprendimiento elevada: uno de cada tres trabajadores emprende un negocio. Sin embargo, casi el 90% son emprendimientos unipersonales; entre aquellos que emplean trabajadores, solo el 25% tiene más de cinco empleados a cargo. Son negocios que han surgido ante la falta de oportunidades laborales en el sector asalariado, y no cuentan con potencial para convertirse en empresas transformadoras. De hecho, según el informe, las pocas que surgen con esta característica dinamizadora no pueden desarrollarse plenamente en parte porque no encuentran trabajadores con las capacidades requeridas dado que muchos de ellos están refugiados en el autoempleo perdiendo día a día habilidades útiles para el segmento dinámico de la economía.

"La abundancia de empresas muy pequeñas y la escasez relativa de medianas y grandes llevan a la región a un círculo de baja productividad y de informalidad en la creación de empleo. La idea que intentamos aportar con el informe es la de potenciar nuevas políticas que traten de romper este círculo vicioso", aseguró Brassiolo