La biodiversidad como agente de desarrollo sostenible de América Latina
La abundancia relativa de biodiversidad representa una de las principales ventajas comparativas de América Latina.
América Latina es una de las regiones del planeta más ricas en diversidad biológica. Alberga el 40% de la biodiversidad mundial y dispone del 12% de la superficie total de tierra cultivable. Seis países de la región (Brasil, Colombia, Ecuador, México, Perú y Venezuela) se encuentran entre los diecisiete países calificados como “megadiversos” del mundo, en virtud de que concentran el 70% de la biodiversidad global.
No cabe duda de que esta abundancia relativa de biodiversidad representa una de las principales ventajas comparativas de la región, pues sus diversos y abundantes recursos naturales comprendidos en ecosistemas terrestres, costeros y marinos, conforman alrededor del 80% de los biomas del mundo, el 22% de la cobertura forestal a nivel mundial y el 30% de los recursos disponibles de agua dulce en el planeta. De acuerdo a UNCTAD. el 70% de las personas en situación de pobreza a nivel mundial dependen directamente de la biodiversidad, lo cual evidencia la importante ventaja relativa de América Latina.
No obstante la ventajosa posición comparada de la región, los efectos del cambio climático y el crecimiento insostenible de las poblaciones amenazan al equilibrio de la naturaleza, aumentando la presión sobre los recursos naturales, afectando directamente a la biodiversidad y el funcionamiento de los ecosistemas. La pérdida de hábitats explicada por la explotación (a veces descontrolada) de la agricultura y los pastizales para ganado es la amenaza más grave para la biodiversidad en la región y, a pesar de que la tasa de pérdida ha disminuido en la última década, el área total transformada por año es aún elevada. Así mismo, la tasa de deforestación de la región amazónica ha aumentado en los últimos años, con énfasis en Brasil y Colombia, donde el último año creció en un 22% y 23%, respectivamente.
La adaptación basada en ecosistemas comprende el uso de la biodiversidad como parte de una estrategia general para ayudar a las personas a adaptarse a los efectos adversos del cambio climático. En esta línea, los negocios basados en el uso sostenible de la biodiversidad -o negocios verdes- representan uno de los componentes importantes para reducir la vulnerabilidad al cambio climático y fortalecer la resiliencia de las poblaciones y sus sistemas productivos, ya que incorporan prácticas sostenibles que resguardan las dinámicas ecosistémicas y fomentan la gestión sostenible de los bosques y modelos agroforestales, evitando en consecuencia la conversión de hábitats naturales en sistemas productivos.
América Latina tiene la oportunidad de tomar el liderazgo en la generación de negocios verdes, impulsando el desarrollo sostenible de aquellas comunidades que dependen de los ecosistemas y sus servicios para subsistir. Para ello, es necesario fortalecer cadenas de valor aplicando un manejo adaptativo, lo cual se traduce en la implementación de actividades de uso sustentable y de conservación de la biodiversidad, lo cual permitiría una distribución equitativa de los beneficios ambientales, sociales y económicos, a la vez que favorecería un proceso de mejora continua de las prácticas productivas.
En este sentido, desde CAF, conscientes de la neurálgica importancia relativa de conservar la biodiversidad y aprovechar de manera responsable el capital natural de América Latina, a través del Programa de Biodiversidad de la Vicepresidencia de Desarrollo Sostenible, estamos acompañando a los países de la región en la implementación de estrategias enfocadas en promover la conservación de los recursos biológicos, los negocios sostenibles y las prácticas de distribución justas y equitativas de beneficios. Contamos para ello con diversos instrumentos de asistencia técnica y financiamiento, que articularnos mediante la oportuna movilización de recursos y asesoramiento a tomadores de decisión, con la finalidad última de generar políticas públicas afines a la generación de servicios ecosistémicos consecuentes con la oportunidad de alentar el desarrollo sostenible de la región.