Financiamiento climático para desarrollar infraestructura sostenible en América Latina y el Caribe
Durante este evento se discutirán los retos y las oportunidades que enfrentan los países de América Latina en la implementación de infraestructura sostenible necesaria para su desarrollo y que esté alineada con los compromisos bajo el Acuerdo de París. También se explorarán los diferentes mecanismos de articulación entre el financiamiento de la agenda de cambio climático y el desarrollo de los países.
Los principales economistas mencionan el cambio climático como la mayor falla del mercado en la historia humana, con implicaciones potencialmente perturbadoras para el bienestar social, el desarrollo económico y la estabilidad financiera de las generaciones actuales y futuras: las estimaciones conservadoras indican que un cambio climático no controlado podría llevar a costos globales equivalente a perder entre el 5 y el 20% del Producto Interno Bruto (PIB) mundial cada año.
Como resultado, los tomadores de decisiones públicas y privadas de todo el mundo se enfrentan al doble imperativo de:
- Reducir de forma significativa y rápida las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en todo el mundo, al descarbonizar la economía mundial, a fin de evitar que el aumento medio de la temperatura mundial llegue a niveles peligrosos
- Adaptar los patrones globales de consumo y producción, los estilos de vida y las cadenas de suministro subyacentes a los impactos físicos, meteorológicos e hidrológicos del cambio climático que ahora son inevitables
El sector financiero, que se encuentra en el corazón de los mercados globales de hoy en día, enfrenta los mismos desafíos, pero también se le presentan las vastas oportunidades financieras asociadas con la reorganización de las economías hacia la compatibilidad climática:
- Por un lado, los riesgos asociados al cambio climático, categorizados recientemente en riesgos de transición, físicos y de responsabilidad civil, deben ser comprendidos, identificados, evaluados, administrados y, eventualmente, divulgados por instituciones de todos los sectores financieros.
- Por otro lado, la transición hacia economías bajas en carbono y resilientes al clima requerirá una inversión adicional en un orden de magnitud de al menos USD 60 billones, desde ahora hasta 2050; y esa inversión requerirá financiamiento que, en parte, deberá ser provisto por las instituciones financieras: USD 35 billones para descarbonizar, a través de la energía renovable y la eficiencia energética, el sistema energético mundial; otros USD 15 billones para adaptar la infraestructura creada por el hombre a las cambiantes condiciones meteorológicas; y otros 2 billones de USD para reorganizar el uso mundial de la tierra son formas que satisfacen las crecientes demandas de productos agrícolas mientras se detiene la deforestación tropical.