Ofrecidos US$ 3.500 millones a Colombia

Con la presencia del presidente de Colombia, Álvaro Uribe Vélez, como testigo de honor, el presidente ejecutivo de la Corporación Andina de Fomento, Enrique García, y el Ministro de Hacienda, Roberto Junguito, firmaron hoy una declaración conjunta en la Casa de Nariño en la que la CAF expresa su disposición a otorgarle al país financiamiento del orden de los US$ 3,500 millones para el período 2003-2006.

García, quien destacó la voluntad del gobierno colombiano de fortalecer el equilibrio macroeconómico y el proceso de reformas estructurales, señaló que en una coyuntura de bajo crecimiento económico y de un contexto internacional desfavorable se hace indispensable contribuir a crear las condiciones adecuadas para la recuperación de la inversión productiva y del empleo.

La firma de esta declaración cierra la misión de programación, en desarrollo de la cual el presidente ejecutivo de la CAF y otros altos funcionarios de la Corporación se reunieron con los Ministerios de Hacienda, de Comercio y de Transporte y con el Departamento Nacional de Planeación.

Con relación a la actividad de la CAF en Colombia, el presidente del multilateral recordó que en los últimos cuatro años la Corporación realizó operaciones por un total cercano a los tres mil millones de dólares y triplicó así su cartera, que pasó de US$ 600 a US$ 2.226 millones. En la actualidad Colombia es el mayor beneficiario de los créditos de la CAF.

Los nuevos recursos anunciados hoy estarán orientados tanto al sector público como al privado, con especial énfasis en el financiamiento a programas y proyectos dirigidos a las siguientes áreas: estabilidad macroeconómica, reformas estructurales e inserción en mercados internacionales (US$ 900 millones); infraestructura de apoyo a la integración, la competitividad y la logística regional (US$ 1.800 millones), y a la modernización y fortalecimiento de los sectores empresarial y financiero (US$ 800 millones).

La acción de la CAF estará orientada así mismo a la atracción de recursos de otras fuentes, como la banca privada y los mercados internacionales de capital, tanto en calidad de préstamos como de inversión directa. Se pondrá especial atención a los cofinanciamientos y a la aplicación de otras soluciones financieras innovadores.

Al respecto, vale la pena destacar que una tercera parte de la cartera actual de la CAF en Colombia -es decir, US$ 717 millones- corresponde a recursos de otras fuentes financieras que participaron, bajo el paraguas de la Corporación, en operaciones como créditos sindicados y garantías parciales de crédito.

También merece especial atención el compromiso de la Corporación con el apoyo integral a las Pequeñas y Medianas Empresas mediante asistencia técnica, financiamiento y aportes de fortalecimiento patrimonial, a través del recientemente creado Fondo de Inversión de Desarrollo Empresarial (FIDE). De la misma forma, mediante el Fondo de Desarrollo Humano (FONDESHU), la CAF intensificará el apoyo comunitario, microfinanciero, artesanal y de desarrollo cultural.

Interacción con programas estratégicos

El apoyo financiero de la CAF estará complementado mediante el aporte de recursos de cooperación técnica no reembolsable por un monto aproximado de US$ 10 millones durante el período, que estarán dirigidos principalmente a las áreas de fortalecimiento institucional, consolidación de procesos de descentralización y modernización de los marcos regulatorios.

Dentro del anterior apoyo se buscará la interacción de los mismos en programas estratégicos de impacto regional, entre los cuales se destacan la Iniciativa para la Integración de la Infraestructura Regional Suramericana (IIRSA), el Programa Andino de Competitividad (PAC), el Programa de Gobernabilidad, el Programa Latinoamericano del Carbono (PLAC), el Programa Preandino para la Prevención y Mitigación de Desastres Naturales, el Programa de Biodiversidad y los Programas para el Desarrollo de los Mercados de Capital.

La declaración conjunta concluye haciendo un llamado a todos los sectores sociales, políticos y económicos para que, acompañados de la comunidad internacional, “trabajen conjuntamente por el desarrollo del país y ayuden decididamente para que Colombia recobre un adecuado crecimiento económico con sostenibilidad política y social.”