América Latina debe incrementar su inversión en energía limpia

Empresarios y financieros del sector energético brasilero se reunieron en el Seminario Internacional de Energía Limpia y Desafíos Tecnológicos en Latinoamérica, organizado por la Comisión de Integración Energética Regional (CIER), para revisar los retos de planeamiento que supone la implementación de los acuerdos climáticos de la COP 21 de París.

El foro resaltó que el foco estará en balancear el " Trilema Energético", la conocida diatriba entre alcanzar simultáneamente la seguridad energética, el acceso universal a los servicios energéticos y la sustentabilidad ambiental. Y la clave está en la expansión de las energías limpias.

En este sentido, CIER recalcó el potencial de recursos renovables no desarrollados que hay en Brasil y en toda América Latina, dando particular importancia a la integración física y comercial de los sistemas energéticos regionales para garantizar la seguridad energética de la región.

Se presentaron distintos ejemplos innovadores para la expansión de las redes con un alto aporte de fuentes renovables, al igual que del estado de la inversión en energías limpias en América Latina y el Caribe.

Se resaltó que la proporción actual de inversiones en infraestructura es insuficiente para cubrir el incremento de 66% de la demanda proyectada hacia el 2030. De acuerdo con datos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), América Latina es la región que menos invierte en infraestructura en el mundo. Según el BID, el requerimiento para cerrar la brecha de infraestructura sería del 5% del PIB regional, mientras que a penas se ha aportado en promedio el 1,5% del PIB regional durante la última década.

CAF, representada por Mauricio Garrón, Director de Análisis y Estrategia de Energía, resaltó dos puntos claves necesarios para incrementar el aporte de las energías limpias en la matriz energética latinoamericana.

Por una parte, la importancia de fortalecer las inversiones en generación hidroeléctrica, ya que ésta se presenta como la  opción más económica, confiable y abundante de la región, capaz de satisfacer las necesidades eléctricas de América Latina varias veces.

Por último, enfatizó la importancia del apoyo multilateral en los proyectos de energías limpias. La razón es que, en ausencia de regulaciones favorables para priorizar este tipo de inversiones, las multilaterales no solo son capaces de proveer financiamiento, sino que también actúan como un mitigador de riesgos que permite la entrada de terceros, y aporta asistencia técnica especializada que agrega valor a las inversiones.