5 avances en el desarrollo de América Latina en 2017
Recorremos lo más destacado del desarrollo latinoamericano en 2017: desde el compromiso por tener ciudades más inclusivas y habitables, hasta las oportunidades geopolíticas de la región en un nuevo contexto global.
A nivel económico, el 2017 se recordará como el año en que América Latina salió de una larga recesión, aunque los expertos coinciden en que el clima de incertidumbre se mantendrá a lo largo de 2018 a causa del volátil contexto sociopolítico internacional.
Mientras la mayoría de países de la región mejoraban su desempeño económico, también registraban avances en sectores clave como la gestión integral de las ciudades, la implementación de los acuerdos climáticos, la integración regional o el fortalecimiento institucional.
A continuación resumimos los avances más destacados del año en materia de desarrollo:
Amplio consenso para crear ciudades al servicio de los ciudadanos
Según el Reporte de Economía y Desarrollo (RED 2017) de CAF, la situación en la mayoría de ciudades latinoamericanas ha impedido que la región alcance los niveles de desarrollo registrados en las economías más avanzadas. El informe también considera que es posible revertir esta situación y aprovechar los beneficios económicos de la urbanización, en una región donde 8 de cada 10 habitantes vive en ciudades. Para ello, en los próximos años América Latina deberá apostar por centros urbanos accesibles que se conviertan en motores de crecimiento e inclusión social, para lo que será necesario incidir en tres dimensiones: el uso del suelo, que establece dónde se localizan las empresas y las familias en una ciudad; el mercado residencial, que determina la calidad de las viviendas, así como su disponibilidad y precio; la oferta e infraestructura de transporte, que define cómo se mueven las personas y las mercancías en el interior de la ciudad.
En este sentido, la Conferencia CAF Ciudades con Futuro reunió en Lima a Destacados expertos internacionales para debatir cómo lograr que las ciudades latinoamericanas sean más habitables, competitivas y respetuosas con el medio ambiente. Durante el encuentro se abordaron temas clave del desarrollo urbano, como la mejorara de las condiciones de vida en los asentamientos precarios, la gestión integral del riesgo de desastres, el impulso al desarrollo económico-productivo, los mejores mecanismos de financiamiento de políticas urbanas, o las experiencias exitosas en el desarrollo de infraestructura para la construcción de ciudades inteligentes.
Hacia un pacto por la productividad
Diferentes esferas políticas y sociales han hecho un llamado para que América Latina se comprometa con el aumento de la productividad, con la finalidad de lograr un crecimiento sostenido que no dependa tanto de la explotación de las materias primas.
América Latina logró en las últimas décadas una estabilidad macroeconómica reflejada en menor inflación y un mayor poder adquisitivo para sus habitantes. En el ámbito social se ejecutaron políticas eficientes contra la pobreza que se redujo, en poco más de 10 años, desde niveles cercanos a 50% a niveles por debajo de 25% en promedio.
En este sentido, Luis Carranza, presidente ejecutivo de CAF, asegura que la región necesita consolidar los avances cosechados en las últimas décadas, y eso requiere prudencia fiscal, pero también un pacto por la productividad que tiene que estar en la agenda de todos, tanto del sector público como del privado. Además, Carranza aboga por desarrollar cadenas de producción globales, clústeres productivos, aumentar significativamente la inversión en infraestructura, hacer crecer y fortalecer las clases medias y contribuir a la mejora de la institucionalidad en nuestros países.
Mejora la posición de América Latina en el mundo
Durante 2017 se realizaron una multitud de foros para debatir el papel reservado para América Latina ante el nuevo contexto geopolítico marcado por la ausencia de un liderazgo global. Entre ellos destacó la Conferencia CAF en Washington DC, organizada por CAF, el Diálogo Interamericano y la OEA, que reunió a más de 1.000 líderes mundiales para analizar nuevas fórmulas de integración latinoamericana en tiempos de proteccionismo, y debatió las mejores estrategias para dinamizar el crecimiento económico de la región. Expertos internacionales de primer nivel, como Francis Fukuyama o Rick Waddell, exploraron las oportunidades geopolíticas y comerciales que se le presentan a América Latina en un escenario internacional marcado por los proteccionismos, la disrupción tecnológica y la lucha contra la corrupción.
Otro foro destacado fue la Conferencia CAF-Sciences Po, realizada en parís, donde los panelistas concluyeron que las relaciones geopolíticas están sufriendo profundas transformaciones como consecuencia del vacío en el liderazgo global y de la aparición de actores emergentes, y esto representa una buena oportunidad para que América Latina y Europa estrechen sus lazos y fortalezcan su influencia internacional.
América Latina, un actor climático emergente
En 2017, la región se consolidó como uno de los actores climáticos más importantes, al estar logrando canalizar los recursos financieros necesarios para lograr una transición a economías bajas en carbono.
La retirada de Estados Unidos de los Acuerdos de París alarmó no solo a los más acérrimos ambientalistas, sino al grueso de la comunidad científica y política del planeta. El temor a que la primera economía del mundo vuelva a abrazar a las energías fósiles, las principales causantes del cambio climático, es, cuanto menos, preocupante. Pero a pesar de la incertidumbre, existen sólidos indicios para asegurar que el desarrollo de energías alternativas y más eficientes va por buen camino. Y lo está haciendo, en buena medida, gracias al impulso de regiones como América Latina, hasta hace poco un actor inadvertido en el tablero climático internacional.
En los últimos 10 años las inversiones en energías renovables en la región (excluyendo a Brasil) se multiplicaron por 9, pasado de 1.000 millones de dólares al año en 2005 a 9.300 millones de 2013 a 2015. Esto ha permitido que hoy en día América Latina cuente con la matriz energética más limpia del mundo, con una representación del 25% de las fuentes renovables, en contraste con el 13% de media global.
Gran acuerdo regional por la primera infancia
En 2017, representantes de gobiernos latinoamericanos, organismos multilaterales, organizaciones de la sociedad civil y la academia firmaron un gran pacto para incrementar los recursos financieros y los servicios públicos hacia la primera infancia y fortalecer así la atención integral de los niños y niñas menores de 6 años.
El pacto, que incluyó a organismos como CAF, Diálogo Interamericano, BID o Banco Mundial, pretende consolidar políticas que adopten una visión de los niños y niñas como sujetos de derecho y su desarrollo integral como propósito; fortalecer la gestión para una atención integral de calidad, pertinente y oportuna, dirigida a la primera infancia en los entornos donde transcurre su vida; generar procesos participativos para la definición de metas o indicadores de desarrollo integral en la primera infancia desde un enfoque de derechos; construir y consolidar una coalición sociopolítica que impulse la prioridad del desarrollo integral en la primera Infancia tanto a nivel de las políticas públicas como del compromiso de los ciudadanos; y establecer procesos rigurosos de gestión del conocimiento y evaluación de las acciones que se dirigen a las mujeres gestantes y niños en primera infancia.