¿Puede un sistema de becas revertir la escasez de docentes en Uruguay?
El rol de los docentes es fundamental para la formación de habilidades en los niños y jóvenes. Los buenos docentes son capaces de tener una pedagogía adaptable a todos los niveles de habilidades y son capaces de enseñar en cualquier circunstancia o contexto. Pero las claves para tener docentes formados son muchas e incluyen reclutar buenos candidatos, capacitarlos, estimular su esfuerzo y lograr retenerlos en la carrera docente
En Uruguay, si bien los niveles de titulación han crecido en los últimos años, los profesores titulados no son suficientes para cubrir las necesidades de personal de la educación secundaria (Informe sobre el Estado de la Educación en Uruguay 2015-2016, Instituto Nacional de Evaluación Educativa). Alrededor de 30% de los cargos de docentes en la educación secundaria pública permanecen vacantes o son cubiertos por personas sin formación específica o con formación inicial incompleta. En la educación primaria pública, se ha logrado un porcentaje de maestros titulados de 100%, pero dado el ritmo de egresos de la carrera de Magisterio las necesidades de reposición anual de docentes para cubrir retiros de la función y creación de nuevos cargos podrían ocasionar un déficit de maestros en el mediano plazo.
Con el objetivo de atraer más y mejores candidatos a la formación docente y promover su continuidad y egreso, el Consejo de Formación en Educación (CFE), encargado de la formación de profesionales de la educación, ha constituido un sistema de becas de apoyo económico para los estudiantes de Magisterio y Profesorado. Estas iniciativas se cristalizan en las becas Julio Castro y en las becas económicas de Profesorado. Las becas Julio Castro, financiadas por el Ministerio de Educación y Cultura, están dirigidas a los estudiantes de 1° y 2° año de Magisterio de los diferentes Institutos de Formación Docente. Las becas económicas de Profesorado están destinadas a los estudiantes de 1° a 4° de las carreras de profesorado, educador social, y maestro técnico y son gestionadas y financiadas por el CFE. Actualmente los beneficiarios de ambas becas reciben ocho mensualidades de dos BPC (Base de Prestaciones y Contribuciones, índice que se utiliza como sustituto del salario mínimo nacional para calcular las bases de tributación, ingresos y prestaciones sociales) equivalente a USD 2.000 al año.
Los criterios para otorgar estas becas, en cualquiera de sus modalidades, son las condiciones socioeconómicas y el desempeño académico de los postulantes. De esta manera, se busca priorizar a aquellos candidatos de alto rendimiento académico que enfrentan restricciones económicas para llevar adelante sus estudios. En el caso de los jóvenes que solicitan la beca en el primer año, deben presentar el promedio de calificaciones del bachillerato. Para alumnos que ya hayan cursado estudios en los centros del CFE, se tiene en cuenta su desempeño previo. En el caso de las becas Julio Castro, también se realiza una entrevista a los candidatos que busca identificar la vocación del estudiante para ser maestro. Para promover la continuidad de los alumnos, la renovación anual de las becas está sujeta a la aprobación del 70% (60% para alumnos de primer año) del total de las asignaturas de años anteriores y a la inscripción en al menos 70% de las asignaturas del siguiente año.
Dado el interés en analizar cuáles son los efectos del sistema de becas, el CFE, a través de la División de Informática y Estadística, aplicó a la I Convocatoria internacional de evaluaciones de impacto promovida por CAF en 2017. Este proyecto fue seleccionado para recibir apoyo del equipo de CAF para diseñar e implementar una evaluación que permita responder cuál es el impacto del sistema de becas en la tasa de matriculación, la tasa de egreso y el desempeño académico de los alumnos.
Desde CAF, se espera que los resultados de esta evaluación provean aprendizajes de calidad que puedan ser utilizados como herramienta de gestión y que contribuyan a los esfuerzos que lleva adelante el CFE y el Ministerio de Educación y Cultura para fortalecer el sistema educativo de Uruguay.