Evaluación de impacto en la gestión pública: más allá del impacto
CAF ofrece un nuevo curso gratuito de Evaluación de impacto para la gestión pública. La iniciativa cubre temas básicos de evaluación, así como variados ejemplos y algunos temas relacionados a su implementación.
La evaluación de impacto genera aprendizajes que van más allá de la magnitud del efecto de una política; es también una herramienta que sirve para catalizar la mejora institucional, que pone en valor actividades como la sistematización de datos administrativos, el análisis de las brechas o dificultades de implementación de proyectos y la recolección de datos nuevos sobre procesos. De aquí que la evaluación de impacto deba trascender la medición de programas específicos y pase a convertirse en una herramienta de uso generalizado en las instituciones para lograr mejoras incrementales en la efectividad del uso de recursos. Esta es la clave para el mejoramiento continuo y sostenible de la gestión pública.
El objetivo del curso gratuito en línea sobre evaluación de impacto (MOOC por sus siglas en inglés) de CAF –banco de Desarrollo de América Latina- es iniciar al estudiante en los conceptos básicos de evaluación de impacto e ilustrar cómo es que puede ser una herramienta valiosa para potenciar la gestión pública. Además de ilustrar con ejemplos concretos la evaluación de impacto de políticas públicas, también se muestran ejemplos de lo que llamamos evaluaciones de gestión, donde el énfasis está en evaluar la forma como se implementa la política, además de la política en sí: evaluar el cómo además del qué.
En el primer módulo del MOOC los participantes encontrarán el enfoque general de CAF sobre la evaluación de impacto, ciertas definiciones básicas, el tipo de pregunta que nos ayuda a responder, la importancia de los datos administrativos y el monitoreo, además las condiciones básicas para una evaluación de impacto de calidad.
¿Qué es una evaluación de impacto y para qué sirve?
La evaluación de impacto busca cuantificar la diferencia entre los resultados que obtienen los beneficiarios de un programa con respecto a lo que esos mismos beneficiarios hubiesen obtenido en ausencia del programa. Sirve para valorar el retorno, en variables específicas, de los recursos invertidos en la intervención. Este retorno a veces se puede comparar con el costo del programa, o con el retorno de intervenciones alternativas que buscan afectar el mismo objetivo.
¿Qué nos ayuda a entender la evaluación de impacto?
Además de cuantificar el efecto del programa o intervención en el promedio de los beneficiados/afectados, la evaluación puede medir si este efecto es diferente para sub grupos o para dimensiones distintas, y esta información ayuda a entender las razones por las cuales el efecto es de la magnitud estimada.
¿Importa medir en lo cotidiano?
Las actividades habituales de entrega de servicios públicos son una fuente valiosa de información estadística para hacer seguimiento de la gestión de los recursos y también, a veces, para medir impactos. Desarrollar mecanismos de captura de esta información de manera sistemática es importante para tener buenos diagnósticos de fallas de implementación y pueden ser complemento crucial de indicadores especialmente diseñados en estudios de impacto.
¿Qué necesitamos para llevar a cabo una evaluación de impacto?
1. Tener claridad sobre la intervención o política que se quiere medir y, al menos, alguna hipótesis sobre los canales a través de los cuales ésta debe estar vinculada con ciertas variables de resultado.
2. Una pregunta puntual sobre el impacto o la gestión del programa, para resolver y/o cuantificar.
3. Datos administrativos pertinentes para la pregunta de evaluación o la posibilidad de recolectar información primaria para el análisis cuantitativo.